IZQUIERDA UNIDA TORO

NOTA DE PRENSA 07-09-2007
"Análisis de las fiestas de San Agustín: imprevisión, falta de trabajo e imaginación y despilfarro económico".

Las fiestas de San Agustín de este año han sido un verdadero caos. Parecía difícil empeorar lo que se ha hecho otros años, pero el Alcalde-Senador de las ocurrencias y su equipo de gobierno lo han conseguido.

1º) El preludio de las fiestas ya fue negativo. El 11 de agosto realizan un concierto de Rock con la clara intención de contrarrestar una actuación anterior organizada por dos asociaciones. Fue un cúmulo de desaciertos:
- Anunciaron la presencia del grupo de Heavy Avalanch, antes de tener la confirmación, y cuando los seguidores de este grupo conocían que ese fin de semana actuaban en Mazarrón en un festival. El resultado fue, lógicamente, que tras anunciarlo, no estuvo en Toro, sino en esa localidad murciana.
- Deprisa y corriendo, se llama a otros dos grupos, Centinela y Nocturnia. Centinela un grupo bastante conocido en el mundillo heavy, podría haber atraído a un importante número de seguidores, pero no se hizo ningún tipo de publicidad. En la ciudad de Toro prácticamente no se colocaron ni carteles y fuera de Toro (Zamora, Valladolid, Tordesillas, Benavente, Salamanca), no se hizo ninguna promoción.
- Al grupo telonero, Nocturnia, se le avisa un día antes del concierto.
- El resultado fue una escasez absoluta de público (sólo habría unas cincuenta personas) y, por tanto, pérdidas económicas para el ayuntamiento de Toro.

2º) El PP de Toro no había hecho sus deberes antes de las elecciones de mayo, en este asunto, como en tantos otros. De este modo, si hubieran perdido las elecciones, los que accedieran al ayuntamiento se habrían encontrado sin nada organizado ni previsto, cuando no hace falta ser político para saber que las actuaciones musicales hay que contratarlas con varios meses de antelación, para evitar encontrarse sin nada en verano y para ahorrar en los contratos.

3º) Se anuncian en el programa de fiestas los conciertos en el Patio de los Condes de Requena, tras la Queja al procurador del Común de Izquierda Unida sobre el uso aberrante de la Estación de Autobuses para conciertos, ocurrencia del Alcalde-Senador. El lugar, una verdadera escombrera en medio de la ciudad y lleno de zanjas, no puede ser utilizado y deben cambiar al Patio del Colegio Magdalena Ulloa. La imprevisión está servida.

4º) Los conciertos, organizados deprisa y corriendo, cuentan con muy poco público y suponen un gasto más que repercute sobre las endeudadas arcas municipales. Sólo en tres actuaciones musicales se han gastado más de 60.000 euros, en una ciudad con la deuda galopante que presenta.

5º) Una semana antes de comenzar las fiestas todavía no sabían quien iba a ser el pregonero de las mismas. Cuatro días antes lo anuncian y se lo “empaquetan” a un hermano de un miembro de la corporación municipal, que con buena voluntad tiene que prepararlo y “sacar” las castañas del fuego a los que siempre lo hacen mal.

6º) El programa de fiestas sigue adoleciendo de los mismo defectos de todos los años: la falta de actividades novedosas, distintas. Se repiten las cuatro cosas de siempre hasta la saciedad (toros, verbenas), y una cosa es mantener lo que se ha hecho siempre y tiene su público al que hay que satisfacer y otra cosa muy distinta, es que no haya nada más. No se hace nada en la calle y no hay animación ni en el centro ni en los barrios.

7º) Se anuncian como grandes novedades un concierto de hip-hop y una cata de vinos. Sin duda alguna, la cata ha sido de lo mejor de las fiestas, pero debemos tener en cuenta que lo hace el Consejo Regulador y que se hace todos los años en la Fiesta de la Vendimia. Por tanto, la novedad no es que se haga, porque ya se hace, sino que además de hacerla en octubre, ahora se ha hecho en San Agustín.

8º) El fin de las fiestas del descontrol y la imprevisión se produjo con el fallido desenjaule nocturno por falta de un generador eléctrico, al coincidir con una verbena y un concierto y averiarse un generador. Ello provocó un evidente malestar en sectores de jóvenes y una protesta. El problema no está en que se averíe un generador, el problema es que año tras año seguimos utilizando generadores para las fiestas y no se soluciona esta situación. Llevan ocho años en el poder municipal y siguen incurriendo en los mismos errores de siempre. No se trabaja y así salen las cosas.

9º) Sigue el desencuentro entre las Peñas y la Concejalía de Fiestas, que no hace, sino oscurecer aún más el panorama de las Fiestas de San Agustín.

10º) La traca final: Si los toros los organiza el empresario de la plaza de toros, las actuaciones musicales y verbenas una empresa de eventos musicales, el Festival Flamenco la Peña Flamenca, las actividades ciclistas la Asociación Ciclista Toresana (por cierto sin ningún apoyo económico del ayuntamiento), las obras en el Teatro Latorre las realiza el Programador del Teatro (empleado municipal), la cata de vinos el Consejo Regulador, etc., la gran pregunta que se hacen los ciudadanos es ¿qué hace el Alcalde-Senador, la Concejalía de Festejos y la comisión de Festejos?. Porque una cosa son las colaboraciones de organizaciones y asociaciones, que son positivas y hay que estimular (de hecho son muy pocas) y otra muy distinta es que el ayuntamiento no haga absolutamente nada, y en lo poco que tiene que hacer (cesión de espacios, infraestructura eléctrica, orden, limpieza), falla estrepitosamente

Izquierda Unida de Toro considera que el gasto que se hace en las fiestas no sirve para satisfacer a los ciudadanos con unas adecuadas fiestas patronales y, a pesar de no ser muy alto, sigue endeudando al ayuntamiento, pues se hace mal y sin previsión. No se arriesga en nada novedoso (que evidentemente puede no gustar), se sigue con la misma rutina y los mismos errores año tras año.
La postura de Izquierda Unida de Toro está claramente reflejada en nuestro programa electoral y es conocida por los ciudadanos y por el PP, que a pesar de intentarla copiar, pues lo hace mal, sin previsión, ni trabajo y de cualquier manera, y además endeudan el ayuntamiento. Los resultados de las fiestas hablan por si solos.